Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no andando en tus propios caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus propias palabras, entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, y te daré a comer la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de Jehová lo ha hablado. 

Dios descansó en el sábado.

Dios descansó porque era Su intención que el hombre descansase; El dejó un ejemplo que deberia ser observado por los seres humanos. Exodo 20:11. El habia terminado la creación de los Cielos y de la Tierra en los seis primeros dias, y aún tenia que crear el sábado. Fue al descansar durante este dia que Dios lo estableció. El sábado representó el toque final de Su obra creadora.

Dios bendijo el sábado.

Dios no apenas hizo el sábado, como también lo bendijo. La bendición sobre el sábado implicaba que el fuese reservado como objeto especial del favor divino y un dia que habria de traer bendiciónes a Sus criaturas. El lo bendijo y santificó para la humanidad, no para Si propio. Es Su presencia personal que trae bendición y santificación al sábado.

Dios santificó el sábado.

Santificar significa hacer algo sagrado o santo, separado como algo destinado al uso sagrado: consagrado. El hecho de que Dios santificó el séptimo día significa que ese día es santo, que Él lo separó para el propósito de enriquecer el relacionamento divino-humano. Dios bendijo y santificó el séptimo día por el hecho de haber en ese día cesado todas sus obras.

Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra que yo hago permanecerán delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra descendencia y vuestro nombre.  Y de mes en mes, y de día de reposo en día de reposo, vendrán todos a adorar delante de mí, dijo Jehová. 
Por el Pastor Robert Costa