Recientemente inicié una serie de Cómo Obtener Relaciones Extraordinarias en la Vida y me gustaría poder compartirte algunos puntos durante las próximas semanas. 
Hay un libro del Dr. Archibald Hart, Hábitos Mentales, donde el comparte lo siguiente: “Nuestro cuerpo es siervo de la mente. Obedece las operaciones mentales, ya sean elegidas en forma deliberada o la que se expresan en forma automática. La enfermedad y la salud, al igual que las circunstancias están enraizadas en el pensamiento.” Mucho de lo que nos pasa en la vida se debe a que no controlamos nuestros pensamientos, y al no poder hacerlo nuestras emociones, reacciones y acciones ganan terreno y nos llevan a un camino donde no queríamos llegar, inclusive a la muerte. Somos lo que pensamos y vamos a obtener lo que estamos pensando, permítame ilustrarlo a través de un artículo que apareció en la revista ”Muy Interesante” de Julio 2002, donde conoceremos el maravilloso poder de la mente. “Un científico de Phoenix, Arizona, quería probar una teoría. Necesitaba un voluntario que llegase a las últimas consecuencias. Lo consiguió en una penitenciaria. 

Era un condenado a muerte que sería ejecutado en la penitenciaria de St. Louis en el estado de Missouri donde existe la pena de muerte ejecutada en la silla eléctrica. Le propuso lo siguiente: él participaría en un experimento científico, en el cual sería hecho un pequeño corte en el pulso, lo suficiente para gotear su sangre. Tenía la probabilidad de sobrevivir; en caso contrario, fallecería con una muerte sin sufrimiento ni dolor. El condenado aceptó, pues era preferible eso a morir en la silla eléctrica; además tenia una oportunidad de sobrevivir. El condenado fue colocado en una cama alta, de hospital, y amarraron su cuerpo para que no pudiera moverse. Hicieron un pequeño corte en su pulso. Abajo de su pulso, fue colocada una pequeña vasija de aluminio. Se le dijo que oiría su sangre gotear en la vasija. El corte fue superficial y no alcanzó ninguna arteria o vena, pero fue lo suficiente para que el sintiera que su pulso fue cortado. Sin que él supiera, debajo de la cama había un frasco de suero con una pequeña válvula. Al cortar el pulso, fue abierta la válvula del frasco para que él creyese que era su sangre la que caía en la vasija. Cada 10 minutos el científico, sin que el condenado lo viera, cerraba un poco la válvula y el goteo disminuía. Mientras tanto el condenado creía que era su sangre la que estaba disminuyendo. Con el pasar del tiempo fue perdiendo color, quedando cada vez más pálido. 

Cuando el científico cerró por completo la válvula, el condenado tuvo un paro cardíaco y murió, sin ni siquiera haber perdido una gota de sangre. El científico consiguió probar que la mente humana cumple, al pie de la letra, todo lo que le es enviado, es aceptado por el individuo, sea positivo o negativo y que tal acción envuelve a todo el organismo, sea en la parte orgánica o psíquica”. Quizás a usted esta historia le parece terrible, pero puede ser la historia de su vida. ¿Cómo son sus pensamientos? ¿Ha podido controlarlos? Quizás estas luchando y pensando: Si mi amigo dijera….Si mi esposo hiciera….Si mi esposa cambiara…Si tuviera un empleo….Si pudiera…son tantos los pensamientos que pasan por nuestra mente y a veces nos distinguimos la verdad de la mentira, lo cierto de lo equivocado, la mente graba y cumple lo que es enviado. Elige hoy cambiar tu forma de pensar, tu puedes tomar responsabilidad por tu vida, puedes elegir tus pensamientos y filtrarlo a la luz de la palabra de Filipenses 4: 8 consideren bien todo lo verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que sea excelente o merezca elogio. (NVI). 

Recuerda esto: No puedo cambiar a las personas, pero si puedo cambiar mi manera de pensar y reaccionar. Hoy tu puedes poner en orden tus pensamientos y sacar todo lo negativo, todo aquello que te daña, como el odio, el rencor, la amargura, la avaricia, el desamor, los celos, las envidias, el orgullo, el egoísmo, la lascivia, la codicia, la mentira, la derrota, el fracaso y tu sabes lo que esta dañando. El poder del Señor se perfecciona en la debilidad, nunca digas no puedes, porque también puedes pensar y llenarte de todo lo positivo, el amor, la paz, el gozo, la paciencia, la fe, la victoria, la fidelidad, la pureza, el éxito. La historia que te conté del presidiario pudo haber tenido un final diferente, si él se hubiese aferrado a la verdad y no a la mentira de sus pensamientos. El obtuvo lo que pensó. “Quien piensa en fracasar, ya fracasó antes de intentar” “Quien piensa en ganar, lleva ya un paso adelante” Deja de ser el promotor de tus fracasos, tú puedes lograr tus sueños. No espantes al éxito. Deja ya de hacerte la víctima. No busques dar lástima. Sé el protagonista de tu vida. Los planes que Dios tiene para ti son de bienestar. Conforme a tus pensamientos será hecho. En amor y liderazgo, Pedro Sifontes Conferencista y Entrenador de Liderazgo y Coaching. Contacto: consejeriaycoaching@gmail.com